lunes, 27 de diciembre de 2010

Roscón de Reyes

Esta es la primera receta que subo al blog. Se trata de un dulce muy típico de estas fechas como ya sabeis. Y es que no hay noche de Reyes sin un buen rosconcito recién horneado, por lo menos en mi casa siempre lo hemos hecho así.
El caso es que nunca creí que me pusiera un día manos a la obra para hacer un Roscón, pero hace un par de semanas se me metió entre ceja y ceja que tenía que intentarlo. En cuanto comenté mi iniciativa repostera todo el mundo se echó las manos a la cabeza diciéndome que era muy difícil, que gente que lo había intentado les habían dicho que era muy complicado y que más valía que me lo comprara en la pastelería y me dejara de historias. Pero yo ya me había empeñado y no había vuelta atrás.
Así que me puse a cotillear por internet un montón de recetas, consulté los blogs a los que sigo para ver los entresijos y truquillos que tiene hacer un roscón, y lo que me encontré es que cada uno lo hace a su manera, no hay dos recetas iguales y eso al principio me volvió loca y pensé en desistir y seguir el consejo que me habían dado, ir a la pastelería y quitarme de complicaciones. Pero no, se me había metido en la cabeza y tenía que intentarlo sí o sí.

Aqui os dejo el resultado y la receta (es un popurri de todas las que consulté, fui cogiendo lo que mejor me pareció de cada una).

Ingredientes:

Para la masa madre:
150 gr. de harina de fuerza.
25 gr. de levadura de panaderia.
100 ml. de leche tibia

Para la masa:
500 gr de harina de fuerza
2 huevos
100 gr. mantequilla
100 gr. azúcar glass.
agua de azahar
ralladura de medio limón y media naranja
100 ml. leche tibia
media cucharadita de sal

Para decorar:
1 huevo
almendra laminada
fruta escarchada
azúcar

Elaboración:

Lo primero es la masa madre. Para esto disolvemos los 25 gr. de levadura fresca en la leche, luego añadimos la harina y amasamos bien hasta integrar bien todos los ingredientes. Una vez amasado bien todo hacemos una bola, le hacemos dos cortes en cruz y dejamos reposar hasta que doble su volúmen.
Yo lo dejé toda la noche fermentando, aunque si tenemos prisa nos basta con que doble su volúmen (aproximadamente suele tardar unas dos horas)

Después elaboramos la masa del Roscón. Para esto ponemos la harina en un bol y hacemos un huequito en el medio en el que vamos añadiendo los huevos, el azúcar y las ralladuras, el agua de azahar, la leche, la mantequilla y la cucharadita de sal. Añadimos también la bolita de la masa madre y mezclamos todo bien. Obtendremos una masa elástica que hay que amasar bien con movimientos hacia arriba y energicamente. Para esto transladaremos la masa a una mesa o encimera.

Una vez amasado bien, ponemos la masa en un recipiente grande y dejamos levar. Doblará o incluso triplicará su volúmen (esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de escoger el recipiente). También es conveniente tapar con papel film, para aislarlo de posibles corrientes.

Una vez que leve la masa volvemos a amasarla energicamente. Cuando esté bien amasada formamos una bola y la ponemos encima de la bandeja del horno (habermos puesto papel de hornear engrasado para que no se pegue). Dejamos reposar unos 10-15 minutos la masa y después ya pasamos a darle forma de Roscón, introduciendo el dedo en el centro y dando la forma estirando hacia el exterior. Una vez dada la forma volvemos a dejar levar por segunda vez la masa. Cuando haya subido se pinta el Roscón con huevo batido, se decora con almendras o fruta escarchada y con azúcar humedecido.

Ahora solo queda el horneado. Parece que el trabajo está ya todo hecho, pero no, no nos confiemos. El horneado también es importante, y lo digo por experiencia propia ya que a mi se me chamuscó un poco por abajo.
El horno debe estar a unos 180º y lo dejaremos hornear unos 15-20 minutos, pero claro, esto ya depende de cada horno.
Yo aconsejo poner la temperatura solo abajo (poniendo el roscón bastante arriba para que no se nos chamusque la base) y dejar el grill para el final ya que se dora enseguida.

Una vez sacado del horno, pues que os voy a decir, que ya teneis un rosconcito buenisimo para comer. Se puede rellenar de nata, trufa, crema, pero yo esta vez lo he dejado así.

Espero que os haya gustado!!!


Os presento mi blog

Si, ya se que el nombre es un poco cursi, pero es que yo me llamo Bárbara y en este blog quiero dejar constancia de mis pinitos en la cocina, así que me ha parecido una forma graciosa de llamarlo. Pues si, esto va de cocinitas, aunque tengo más hobbies de los que también os hablaré entre receta y receta. La verdad es que tenia ganas de hacer algo así. Hace relativamente poco tiempo que me he puesto a experimentar en la cocina y me han ayudado mucho otros blogs a la hora de buscar recetas, de consultar dudas y enterarme de esos pequeños trucos que no vienen en los libros de cocina. Así que mi blog pretende ser otro granito de arena para ayudar a aquellos que como yo se estén iniciando en este mundillo.